LOS PATRIARCAS
Los Patriarcas son seres del Cosmos, que viven en dimensiones superiores a nosotros y nos ayudan a evolucionar espiritualmente.
Provienen de muy distintos lugares o planetas, pero comparten las mismas misiones con respecto al ser humano. De hecho, hay una Federación de planetas evolucionados que actúan en conjunto. Ellos aparecen de acuerdo con el momento que atraviese la humanidad. Hubo épocas en que se manifestaban más externamente; en otras, aparecieron por un momento para enseñar la agricultura, por ejemplo. Y hay épocas en las cuales aguardan.
Existe una forma de comunicación con ellos y es el contacto con nuestros propios guías . Cuando se quiere establecer un contacto sin escuchar a nuestros guías internos, la experiencia será tóxica, porque el alma de ese ser no está preparado. De ahí tantos mensajes contaminados por la personalidad del canalizador. Cuando quieres saber si una persona está realmente en contacto con ellos, mira las actitudes en la vida cotidiana de ese individuo. Hay demasiada gente que dice tener contactos y no todos son veraces.
Otra forma de establecer contacto con los Patriarcas es vivir y compartir lo que han enseñado a la humanidad. Civilizaciones como las de Egipto, Tíbet o Perú fueron contribuciones decisivas de los Patriarcas.
Estas civilizaciones son sagradas porque:
Crearon sus edificios y su cultura y llevaron una vida cotidiana como si la Tierra reflejase la armonía de los mundos superiores.
Hay una relación directa con los Patriarcas.
Ellos pudieron iniciar a muchos humanos, a partir de la iniciación espiritual, en dimensiones superiores.
Otra forma de contacto con ellos es viajar o peregrinar a los lugares donde tienen sus bases intraterrenas. En estos lugares sagrados hay, sobre el sitio, una conexión cósmica hacia el cielo y una conexión cósmica hacia la Tierra. La iniciación era la doble entrada hacia el mundo superior y el interior para integrar el triángulo espiritual.
Hombre, cielo y tierra.
La peregrinación es un viaje con el objetivo de cambiar interiormente.
El contacto regular con estos sitios sagrados hace que tú mismo sacralices tu propia vida. Cada acto que realices se tiñe de amor, espontaneidad y hermandad.
Sin embargo, vivir a diario en un lugar sagrado traerá desafíos que no podrás integrar por completo. Te conviene estar muy seguro antes de habitar permanentemente en esa zona.
Los Patriarcas han dejado en cada base intraterrena una nave de luz o mer-ka-ba, para que los seres humanos, en forma grupal, puedan utilizarla.
Ellos han ideado el plan de retorno al hogar, a la conciencia a la cual habíamos accedido en el momento cumbre de la Atlántida. Pero esta vez va a ser distinto. Aprendimos a ser responsables por la energía espiritual que recibimos.
Este plan trae la elevación espiritual. Para ello, instauraron tres lugares principales: Egipto: Como espiral masculina. Tíbet: Espiral neutra.
Perú y Yucatán: La red femenina. Por ser femenino, el centro es dual.
De estos tres lugares principales se desprenden 86.000 sitios que vibran en cuarta dimensión. El ser
humano contribuyó con la construcción, en el lugar físico correspondiente, de algún templo de las tres grandes religiones en Occidente y las tres grandes corrientes espirituales de Oriente (budismo, hinduismo, taoísmo).
La enseñanza espiritual impartida por los Patriarcas en estos tres lugares sagrados fue coherente, es decir, cada discípulo humano sabía lo que el otro discípulo humano hacía en otro lugar del planeta. En la actualidad, la red femenina es la que más energía recibe. ¿Por qué? Porque es necesario desarrollar lo espiritual, lo intuitivo, la armonía y por sobre todo la paz. También debemos reconciliarnos con la Tierra para luego darnos cuenta, valorar y saber usar la energía cósmica que se encuentra debajo de nuestros pies.
Asimismo, trajo un formidable repunte para la mujer. Al mismo tiempo, el hombre comenzó a aceptar e integrar su parte interna femenina.
La energetización de la red femenina coloca a Sudamérica en un lugar de mucha responsabilidad espiritual con respecto al Planeta en su totalidad.
Si bien comenzó a prevalecer la red femenina, estos sitios sagrados está tan activos como en SUS épocas de esplendor. Cualquier ser humano puede ir a tomar la iniciación que se desarrollaba en estas áreas. Para ello, tiene que saber cómo era y es la iniciación en cada uno de estos sitios. En Egipto, la preparación a la iniciación se hacía en doce monasterios, situados en el sur, que desembocaban en la Gran Pirámide.
El entrenamiento en los doce monasterios preparaba al discípulo para que venciera sus emociones negativas. Este período era llamado el ojo izquierdo de Horus.
Luego, el discípulo pasaba doce años más estudiando todas las ciencias espirituales. Esta era la preparación del ojo derecho de Horus.
El ojo de Horus (ver diseño)
Después de 24 años, el discípulo estaba preparado para la iniciación en la Gran Pirámide.
Primero se lo llevaba a la llamada Cámara de la Reina, donde aprendía a realizar la "espiral negra" que conducía al centro de la Tierra.
Luego, tenía que pasar tres días encerrado en la Cámara del Rey, venciendo a los espíritus bajos que venían a obstaculizar al discípulo; este se elevaba, saliendo de su cuerpo por la realización de la "espiral blanca". Después de la iniciación, el flamante sacerdote era considerado como uno de los Mae stros humanos ascendidos. Muchos de ellos integraron la base del grupo esenio.
Cuando los Ingleses entraron por primera vez donde se suponía que estaba la momia del faraón dentro de la Cámara del Rey, encontraron sólo un polvo blanco que rápidamente envasaron para llevarlo al Museo de Londres.
Ese cristalito blanco lo produce la glándula pineal cuando está despierta. Por la cantidad encontrada, se piensa que por lo menos 300 discípulos tuvieron su iniciación en las Pirámides.
Luego de los tres días, el discípulo descansaba dentro de la Pirámide, para poder estabilizar la nueva frecuencia vibratoria que había obtenido.
La iniciación era del discípulo que, en nuestros términos más modernos, podemos denominar monje, porque tenía que dedicarse totalmente a su desarrollo espiritual.
Es interesante señalar que las construcciones en Egipto reflejaban la estructura estelar. Las pirámides tienen el mismo alineamiento del cinturón de Orión; el dibujo que hace el río Nilo se corresponde perfectamente con el de la vía Láctea.
Si quieres tomar una Iniciación en Egipto, primero debes desearlo fervientemente. Debes discernir si la fascinación por ir a Egipto es para recordar una iniciación en una encarnación anterior o si va a ser una experiencia novedosa.
Luego de pedirle la autorización a tus guías, espera. Fija una fecha para la partida, aunque no tengas el dinero. Si este aparece por arte de magia, no lo dudes más y emprende el viaje.
Si quieres una experiencia plena, por favor no programes nada. Desde el momento que llegues vas a ser mejor guiado que nunca. Deja a tus Maestros las circunstancias del viaje. Tu viaje no es turístico sino una experiencia interna que aceptaste pasar.
En Tíbet, por su aislamiento geográfico, pudo desarrollarse la máxima capacidad espiritual. Debajo de los monasterios o Lamasterios existen conexiones con la ciudad intraterrena de Shamballa. Los lamas aprendieron todo lo que saben, directamente de los Patriarcas y eran Iniciados por ellos.
Los dos lugares de máxima iniciación en los Andes son Macho Picchu y Tiahuanaco en Bolivia.
En Macho Picchu, la iniciación comenzaba en la montaña que se llama Huayna Picchu que está justo enfrente de la ciudadela.
El Huayna Picchu (montaña joven) es un perfecto tetraedro realizado por la naturaleza.
Durante tres días, el discípulo, que venía siendo preparado en distintos centros sagrados en las inmediaciones de Cuzco, estaba en el pico de la montaña o tetraedro.
Directamente era iniciado por un águila, a la que el discípulo tenía que esperar que apareciera.
El vuelo del águila sobre la cabeza del discípulo abría directamente sus chakras superiores, más allá de su cuerpo físico.
Luego de tan tremenda experiencia, el discípulo bajaba a lo que se llama hoy en día el templo de la Luna. Es un santuario que está un poco mas abajo que la cumbre del Huayna Picchu. En ese momento, se entonaba el mantra que unía el chakra Puerta de las Estrellas con la estrella de la Tierra, para que el iniciado pudiera vincular la energía espiritual con el mundo material.
El mantra es cóndor. Cóndor o Kun-tur es un lenguaje universal y abre la Pachamama, es decir, libera la luz escondida debajo de la tierra.
La Pachamama es una nave de luz que está en la Tierra. Porque la Tierra tiene autoconciencia y esa autoconciencia la expresa por su mer-ka-ba de luz.
El viaje a Machu Picchu comienza pidiendo el permiso. Nuestros guías decidirán el momento más apropiado, en la ciudad intraterrena que está debajo de Machu Picchu y se llama Paititi. Cuando el viaje se produzca, recibirás tu propio guía interno que estará encargado de enseñarte en el camino. Ambos lugares sagrados tienen su contrapartida en el otro hemisferio.
El complemento de Egipto en Occidente es Stonehenge y el complemento en oriente de Perú es la India. Los lugares sagrados con polaridad masculina o femenina tienen como símbolo la Cruz.
Cruz Ankh (ver diseño)
Cruz Andina o Chacana (ver diseño)
En Egipto, es la cruz ankh, símbolo de la eternidad.
En los Andes, el símbolo de la totalidad es la cruz andina o chacana.
La meditación en ambas cruces nos da la integración total de la sabiduría en el correr de todos los tiempos.
Con gran satisfacción y tranquilidad, los Patriarcas ven acercarse nuestros cambios. Saben que su enseñanza está por rendir sus frutos.
Con renovada confianza hacia el Hombre, nos ven emerger de la oscuridad para recuperar nuestra conciencia total y emprender nuestro regreso al Hogar.
MER-KA-BA
VEHÍCULO DE ASCENSIÓN A LA CUARTA DIMENSIÓN
Lic. BERNARDO WIKINSKI
Publicado por O.Oyaneder
Los Patriarcas son seres del Cosmos, que viven en dimensiones superiores a nosotros y nos ayudan a evolucionar espiritualmente.
Provienen de muy distintos lugares o planetas, pero comparten las mismas misiones con respecto al ser humano. De hecho, hay una Federación de planetas evolucionados que actúan en conjunto. Ellos aparecen de acuerdo con el momento que atraviese la humanidad. Hubo épocas en que se manifestaban más externamente; en otras, aparecieron por un momento para enseñar la agricultura, por ejemplo. Y hay épocas en las cuales aguardan.
Existe una forma de comunicación con ellos y es el contacto con nuestros propios guías . Cuando se quiere establecer un contacto sin escuchar a nuestros guías internos, la experiencia será tóxica, porque el alma de ese ser no está preparado. De ahí tantos mensajes contaminados por la personalidad del canalizador. Cuando quieres saber si una persona está realmente en contacto con ellos, mira las actitudes en la vida cotidiana de ese individuo. Hay demasiada gente que dice tener contactos y no todos son veraces.
Otra forma de establecer contacto con los Patriarcas es vivir y compartir lo que han enseñado a la humanidad. Civilizaciones como las de Egipto, Tíbet o Perú fueron contribuciones decisivas de los Patriarcas.
Estas civilizaciones son sagradas porque:
Crearon sus edificios y su cultura y llevaron una vida cotidiana como si la Tierra reflejase la armonía de los mundos superiores.
Hay una relación directa con los Patriarcas.
Ellos pudieron iniciar a muchos humanos, a partir de la iniciación espiritual, en dimensiones superiores.
Otra forma de contacto con ellos es viajar o peregrinar a los lugares donde tienen sus bases intraterrenas. En estos lugares sagrados hay, sobre el sitio, una conexión cósmica hacia el cielo y una conexión cósmica hacia la Tierra. La iniciación era la doble entrada hacia el mundo superior y el interior para integrar el triángulo espiritual.
Hombre, cielo y tierra.
La peregrinación es un viaje con el objetivo de cambiar interiormente.
El contacto regular con estos sitios sagrados hace que tú mismo sacralices tu propia vida. Cada acto que realices se tiñe de amor, espontaneidad y hermandad.
Sin embargo, vivir a diario en un lugar sagrado traerá desafíos que no podrás integrar por completo. Te conviene estar muy seguro antes de habitar permanentemente en esa zona.
Los Patriarcas han dejado en cada base intraterrena una nave de luz o mer-ka-ba, para que los seres humanos, en forma grupal, puedan utilizarla.
Ellos han ideado el plan de retorno al hogar, a la conciencia a la cual habíamos accedido en el momento cumbre de la Atlántida. Pero esta vez va a ser distinto. Aprendimos a ser responsables por la energía espiritual que recibimos.
Este plan trae la elevación espiritual. Para ello, instauraron tres lugares principales: Egipto: Como espiral masculina. Tíbet: Espiral neutra.
Perú y Yucatán: La red femenina. Por ser femenino, el centro es dual.
De estos tres lugares principales se desprenden 86.000 sitios que vibran en cuarta dimensión. El ser
humano contribuyó con la construcción, en el lugar físico correspondiente, de algún templo de las tres grandes religiones en Occidente y las tres grandes corrientes espirituales de Oriente (budismo, hinduismo, taoísmo).
La enseñanza espiritual impartida por los Patriarcas en estos tres lugares sagrados fue coherente, es decir, cada discípulo humano sabía lo que el otro discípulo humano hacía en otro lugar del planeta. En la actualidad, la red femenina es la que más energía recibe. ¿Por qué? Porque es necesario desarrollar lo espiritual, lo intuitivo, la armonía y por sobre todo la paz. También debemos reconciliarnos con la Tierra para luego darnos cuenta, valorar y saber usar la energía cósmica que se encuentra debajo de nuestros pies.
Asimismo, trajo un formidable repunte para la mujer. Al mismo tiempo, el hombre comenzó a aceptar e integrar su parte interna femenina.
La energetización de la red femenina coloca a Sudamérica en un lugar de mucha responsabilidad espiritual con respecto al Planeta en su totalidad.
Si bien comenzó a prevalecer la red femenina, estos sitios sagrados está tan activos como en SUS épocas de esplendor. Cualquier ser humano puede ir a tomar la iniciación que se desarrollaba en estas áreas. Para ello, tiene que saber cómo era y es la iniciación en cada uno de estos sitios. En Egipto, la preparación a la iniciación se hacía en doce monasterios, situados en el sur, que desembocaban en la Gran Pirámide.
El entrenamiento en los doce monasterios preparaba al discípulo para que venciera sus emociones negativas. Este período era llamado el ojo izquierdo de Horus.
Luego, el discípulo pasaba doce años más estudiando todas las ciencias espirituales. Esta era la preparación del ojo derecho de Horus.
El ojo de Horus (ver diseño)
Después de 24 años, el discípulo estaba preparado para la iniciación en la Gran Pirámide.
Primero se lo llevaba a la llamada Cámara de la Reina, donde aprendía a realizar la "espiral negra" que conducía al centro de la Tierra.
Luego, tenía que pasar tres días encerrado en la Cámara del Rey, venciendo a los espíritus bajos que venían a obstaculizar al discípulo; este se elevaba, saliendo de su cuerpo por la realización de la "espiral blanca". Después de la iniciación, el flamante sacerdote era considerado como uno de los Mae stros humanos ascendidos. Muchos de ellos integraron la base del grupo esenio.
Cuando los Ingleses entraron por primera vez donde se suponía que estaba la momia del faraón dentro de la Cámara del Rey, encontraron sólo un polvo blanco que rápidamente envasaron para llevarlo al Museo de Londres.
Ese cristalito blanco lo produce la glándula pineal cuando está despierta. Por la cantidad encontrada, se piensa que por lo menos 300 discípulos tuvieron su iniciación en las Pirámides.
Luego de los tres días, el discípulo descansaba dentro de la Pirámide, para poder estabilizar la nueva frecuencia vibratoria que había obtenido.
La iniciación era del discípulo que, en nuestros términos más modernos, podemos denominar monje, porque tenía que dedicarse totalmente a su desarrollo espiritual.
Es interesante señalar que las construcciones en Egipto reflejaban la estructura estelar. Las pirámides tienen el mismo alineamiento del cinturón de Orión; el dibujo que hace el río Nilo se corresponde perfectamente con el de la vía Láctea.
Si quieres tomar una Iniciación en Egipto, primero debes desearlo fervientemente. Debes discernir si la fascinación por ir a Egipto es para recordar una iniciación en una encarnación anterior o si va a ser una experiencia novedosa.
Luego de pedirle la autorización a tus guías, espera. Fija una fecha para la partida, aunque no tengas el dinero. Si este aparece por arte de magia, no lo dudes más y emprende el viaje.
Si quieres una experiencia plena, por favor no programes nada. Desde el momento que llegues vas a ser mejor guiado que nunca. Deja a tus Maestros las circunstancias del viaje. Tu viaje no es turístico sino una experiencia interna que aceptaste pasar.
En Tíbet, por su aislamiento geográfico, pudo desarrollarse la máxima capacidad espiritual. Debajo de los monasterios o Lamasterios existen conexiones con la ciudad intraterrena de Shamballa. Los lamas aprendieron todo lo que saben, directamente de los Patriarcas y eran Iniciados por ellos.
Los dos lugares de máxima iniciación en los Andes son Macho Picchu y Tiahuanaco en Bolivia.
En Macho Picchu, la iniciación comenzaba en la montaña que se llama Huayna Picchu que está justo enfrente de la ciudadela.
El Huayna Picchu (montaña joven) es un perfecto tetraedro realizado por la naturaleza.
Durante tres días, el discípulo, que venía siendo preparado en distintos centros sagrados en las inmediaciones de Cuzco, estaba en el pico de la montaña o tetraedro.
Directamente era iniciado por un águila, a la que el discípulo tenía que esperar que apareciera.
El vuelo del águila sobre la cabeza del discípulo abría directamente sus chakras superiores, más allá de su cuerpo físico.
Luego de tan tremenda experiencia, el discípulo bajaba a lo que se llama hoy en día el templo de la Luna. Es un santuario que está un poco mas abajo que la cumbre del Huayna Picchu. En ese momento, se entonaba el mantra que unía el chakra Puerta de las Estrellas con la estrella de la Tierra, para que el iniciado pudiera vincular la energía espiritual con el mundo material.
El mantra es cóndor. Cóndor o Kun-tur es un lenguaje universal y abre la Pachamama, es decir, libera la luz escondida debajo de la tierra.
La Pachamama es una nave de luz que está en la Tierra. Porque la Tierra tiene autoconciencia y esa autoconciencia la expresa por su mer-ka-ba de luz.
El viaje a Machu Picchu comienza pidiendo el permiso. Nuestros guías decidirán el momento más apropiado, en la ciudad intraterrena que está debajo de Machu Picchu y se llama Paititi. Cuando el viaje se produzca, recibirás tu propio guía interno que estará encargado de enseñarte en el camino. Ambos lugares sagrados tienen su contrapartida en el otro hemisferio.
El complemento de Egipto en Occidente es Stonehenge y el complemento en oriente de Perú es la India. Los lugares sagrados con polaridad masculina o femenina tienen como símbolo la Cruz.
Cruz Ankh (ver diseño)
Cruz Andina o Chacana (ver diseño)
En Egipto, es la cruz ankh, símbolo de la eternidad.
En los Andes, el símbolo de la totalidad es la cruz andina o chacana.
La meditación en ambas cruces nos da la integración total de la sabiduría en el correr de todos los tiempos.
Con gran satisfacción y tranquilidad, los Patriarcas ven acercarse nuestros cambios. Saben que su enseñanza está por rendir sus frutos.
Con renovada confianza hacia el Hombre, nos ven emerger de la oscuridad para recuperar nuestra conciencia total y emprender nuestro regreso al Hogar.
MER-KA-BA
VEHÍCULO DE ASCENSIÓN A LA CUARTA DIMENSIÓN
Lic. BERNARDO WIKINSKI
Publicado por O.Oyaneder
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